Jay� Sar�
27 de MarJeshv�n 5761; 25 de Noviembre 2000
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Resumen de la Parash�
La madre del Pueblo
Jud�o, Sara, muere a los 127 a�os de edad, y su esposo Avraham la entierra en la
cueva de Majpel�. Como Avraham sabe que ese es el lugar donde est�n enterrados
Adam y Jav� est� dispuesto a pagar la exorbitante suma que su due�o, Efr�n el
Hitita, le pide. La responsabilidad de encontrar una mujer adecuada para Ytzjak
cae sobre Eliezer, el fiel siervo de Avraham, quien va a buscarla de entre la
familia de Avraham y no entre los Cananeos. Eliezer viaja a Aram Naharaim, a la ciudad de Najor, y ruega a D-os que le
env�e una se�al por la cual pueda reconocer a la mujer destinada para Ytzjak. Al atardecer, Eliezer llega a un pozo para dar agua a sus camellos y all�
se encuentra con Rivka (Rebeca) a quien pide que le d� agua para beber. Rivka
no solo le da agua, sino que saca del pozo suficiente agua para sus diez
sedientos camellos (500 litros!). Esta generosidad extrema, hace que Eliezer
comprenda� que ella es la mujer adecuada
para ser la esposa de Ytzjak y la madre del Pueblo Jud�o. Ytzjak lleva a Rivka
a la tienda de su madre, se casa con ella y la ama. Este amor le consuela de la
muerte de su madre. Avraham se casa de
nuevo con Hagar, que toma ahora el nombre de Ketura, lo que indica que mejor�
su caracter. Ketura tiene otros seis hijos, a los que Avraham manda al Este
colmados de regalos. Avraham se muere a
los 175 a�os de edad y es enterrado junto a Sara en la Cueva de Majpel�.
Comentario a la Parash�
�Estas son las vidas de Sara...� (23:1)
Nesham�.
Siempre le hab�a gustado ese nombre. Nesham�. Un nombre que susurraba el h�lito
mismo de vida. Nesham� respiraba profundamente el fluido vital en el que
flotaba. Girando al costado, el cable que la manten�a con vida ondulaba
suavemente en el mundo de l�quido oscuro como una serpiente de mar let�rgica. Era
en un momento como �se que uno se pon�a a pensar en las cosas m�s elementales. El
Nombre. La Vida. El Futuro. Ella ten�a miedo. �Qu� le esperaba? Seg�n
recordaba, siempre hab�a estado en este seguro mundo acu�tico. Ahora su vida se
acercaba a su fin. La muerte, el no ser, el fin de todo lo que conoc�a, del
conocimiento mismo, la aguardaba al final del t�nel. Como una fr�gil balsa
flotando al borde de un gigante remolino, se sinti� atra�da inexorablemente al
torbellino. El p�nico se apoder� de ella. Un miedo primordial de lo desconocido
la domin�. �No quiero morir! �Quiero quedarme en este mundo y vivir
eternamente! Hab�a pasado sus d�as aqu� en profunda meditaci�n acerca de los
secretos del universo con su gu�a espiritual. Pero ahora estaba sola. Y sab�a
que era el fin.
Hab�a
llegado el momento. Le pareci� que se le llenaron los o�dos de la m�sica m�s
sublime. Un solo acorde de todas las voces acu�ticas emitiendo un solo acorde
sin palabras que ondulaba en todas las escalas conocidas. El sonido crec�a m�s
y m�s. Sinti� terror. Terror del dolor. Terror de no sentir m�s el dolor. Iba
cada vez m�s abajo. Hasta el fin del mundo. Hasta el sitio de la muerte. Aqu�.
Aqu� era el fin. Todo acab�. Hab�a muerto.
No
era una noche especialmente agitada en las salas de parto del Hospital Hadasa. Otra
peque�a alma acababa de llegar al mundo. Llorando como si hubiera sido
convocada sin muchas ganas a esta esfera terrestre. La enfermera limpi� la
bebita, la envolvi� para que no tuviera fr�o y la coloc� en los brazos de la
madre. La madre mir� a su hija reci�n nacida y pens�: �Qu� hermosa eres, mi peque�a
Nesham�.
Igual
que el mundo oscuro que precede esta existencia, este mundo tampoco es m�s que
un oscuro corredor, comparado al gran palacio de luz al que hemos de ingresar. Este
mundo es el lugar en el que tenemos la oportunidad de prepararnos para ingresar
a ese palacio. En el grado en que nos preparemos, en ese mismo grado podremos
regocijarnos en su resplandor.
No
s� ustedes, pero a m� no me resulta tan f�cil percibir este mundo como un
corredor. Es tan f�cil sorprendernos a nosotros mismos contemplando las luces
de ne�n a lo largo del camino. Es f�cil pensar que este mundo es el palacio en
s�. �Acaso hay alguien que muera con siquiera la mitad de sus sue�os cumplidos?
�Cu�ntos problemas y dolores de coraz�n y dolores de espalda hay en este mundo!
La
parash� de esta semana se llama Jaiei Sara, �Las vidas de Sara�. Qu� t�tulo tan
extra�o. Esta es la parash� en la que Sara fallece. �Por qu� se la llama �Las Vidas de Sara�?
Sin
embargo, el nombre es muy apropiado. Porque �nicamente cuando nos vamos de este
mundo pasajero empezamos a vivir verdaderamente. M�s adelante en el Libro
Bereshit, hay una parash� llamada Vayej� Yaakov � �Y Yaakov vivi�. Es la
parash� en la que Yaakov fallece. Tal como dice el Talmud: �Los justos en sus
muertes son llamados vivos�.
En
hebreo, la palabra �vida� posee un rasgo muy interesante. No tiene forma
singular. Jaim es un sustantivo plural. Tal vez sirva para recordarle a nuestra
nesham�, nuestra alma, que hay
dos vidas, y que �sta no es m�s que un preludio antes de la �atracci�n
principal�.
Rab�
M. A. Amiel en Iturei Tor�
Nos escribe Peter Wilk:
Estimado Rabino:
������ �Qu�
tiene de significativo la ciudad de Safed, y qu� acontecimientos de importancia
tuvieron lugar all�?
Estimado Peter Wilk:
En hebreo, el hombre Tzfat,
�Safed�, se refiere a la palabra �vista�, tzuf:
la cima de la monta�a de Safed ofrece una vista de gran belleza y gran
importancia estrat�gica.
A
un nivel m�s profundo, se trata de una ciudad en la que se puede obtener una
gran vista �panor�mica� de la Tor�. Rab� Abraham Azulai, el kabalista del siglo
17, escribe que su aire puro la predestin� como el mejor lugar de Israel (a
excepci�n de Jerusal�n) en el que uno puede adentrarse en las profundidades de
la Tor�.
Tal
vez esto explique la gran cantidad de gigantes de la Tor� que all� residieron:
Rab� Yosef Karo (autor del Shulj�n Aruj), el Ar�zal, Rab� Israel Najara (autor
de la canci�n de Shabat �Ka Rib�n Olam�), Rab� Shlomo Alkabetz (autor de la
plegaria del viernes a la noche �Lej� Dod�) Shit� Mekubetzet, Rab� Jaim Vital,
y otros.
Durante
un lapso de 50 a�os en el siglo 16, los sabios de Safed reinstituyeron la �smij��, la ordenaci�n rab�nica oficial que
se inici� con Mois�s y desapareci� tras el segundo Templo. Rab� Yosef Karo y
Rab� Jaim Vital fueron algunos de los que recibieron �smij��.
Adem�s
de su pasado, Safed tiene un ilustre futuro: seg�n el Zohar, los muertos se
levantar�n y se reunir�n en Safed, y all� el Mash�aj se revelar� ante el mundo
�y juntos marchar�n hacia Jerusal�n!
Fuentes:
-Safed,
la Ciudad M�stica, David Rossoff, p. 22-35.
Nos escribe Alden Maman:
�A qu� edad mi mujer y yo debemos
empezar a fijarnos que nuestro hijo observe todas las leyes de kashrut? Ahora
reci�n est� por cumplir un a�o, y como comemos kasher, no nos sentimos bien al
darle la mamadera de leche antes de ir a dormir, cuando acaba de terminar la
cena, en la que comimos carne.
Estimado Alden Maman:
En
general, el ni�o que ha llegado a la �edad de la educaci�n�, entre los tres y
los seis a�os, debe ser educado para observar las mitzvot que es capaz de
comprender. Eso no significa que deba entender el significado filos�fico de la
mitzv�, sino que debe entender que es algo que est� permitido o est� prohibido
hacer.
Como
esto es algo que tu hijo de un a�o no entiende, le puedes dar una mamadera de
leche despu�s de que termin� de comer carne. Pero no se la deber�as dar junto
con la carne, al mismo tiempo, y tambi�n conviene limpiar la carne que le pueda
haber quedado en la cara� antes de ofrecerle
la leche.
Una
vez que comprenda la mitzv�, deber� aguardar una hora antes de recibir leche. Cuando
alcance la edad de seis a�os aproximadamente, deber� observar la costumbre de
la familia, por ejemplo, seis horas, siempre y cuando goce de buena salud.
Esto� me recuerda un chiste: una ma�ana, al comer
el desayuno, un ni�o de siete a�os que nunca en su vida hab�a pronunciado una
sola palabra, sorprendi� a su madre dici�ndole: �Se quemaron las tostadas�.
Con
l�grimas de dicha en los ojos, la madre lo abraz�, y al recuperarse de tan
grande emoci�n, le pregunt�: �Pero �por qu� nunca dijiste nada hasta ahora?�
�Hasta
ahora no hab�a habido ning�n problema...�.
Fuentes:
-Los ni�os en la halaj�, Rab� Simja Bunim
Cohen, p. 35
Una
vez, un grupo de gente encontr� un Rollo de la Tor� completo pero fuera de uso,
y no sab�an si era o no kasher. Si hab�a sido escrito por un escriba autorizado
y competente, ser�a kasher, pero si hab�a sido escrito por una persona com�n,
no ser�a kasher. Le plantearon esta pregunta al famoso Nod� BeYehud�, Rab�
Yejezkel Landau, cuya ingeniosa respuesta fue simplemente: �Minhag Israel Tor�
Hijos de Israel� (que significa literalmente �la costumbre jud�a tiene el mismo
status de la Tor�).
�Qu�
quiso decir?
(Pista:
existe� la costumbre jud�a muy difundida
referente a la escritura de un rollo de Tor� que podr�a indicar si el rollo fue
encargado por una comunidad jud�a).
???�ALGUNA PREGUNTA?
Si tiene alguna inquietud sobre leyes o costumbres de su juda�smo, o quiere
aclarar aulguna duda, puede enviarnos su pregunta a [email protected] y procuraremos
contestarle lo m�s pronto posible. Nos reservamos el derecho de publicar las
preguntas y respuestas. No todas las respuestas dadas ser�n publicadas en
"Juda�smo", pero todas ser�n respondidas, B�H.
Melajim I 1:1-31
HORARIO COMLETO
Es
el deber de los padres infundir en sus hijos los mismos valores de la Tor� con
que ellos viven, asegurando que su descendencia se transforme en el pr�ximo
eslab�n de la cadena de la misi�n eterna de D-os. Esta tarea suele continuar
hasta los �ltimos d�as de los padres.
Este
mensaje aparece tanto en la parash� como en la haftar�. En la parash�, el
anciano Abraham, habiendo criado exitosamente a su hijo Yitzjak para que siga
sus pasos, se enfrenta al desaf�o de hallar una mujer que sea apta para el
futuro padre de Israel. La tarea de Abraham como padre no termin� simplemente
porque su hijo haya demostrado ser un justo. Su tarea no se complet� hasta que
no le provey� a Yitzjak todo lo necesario para continuar con la misi�n de su
padre y cumplir con su propio potencial.
En
la haftar� tambi�n hallamos a un Rey David enfermo tiene una tarea final por
completar. Su hijo Adoniahu se hab�a proclamado a s� mismo heredero al trono,
con la esperanza de que el silencio de David fuera tomado como una t�cita
aprobaci�n. Pero David de inmediato hizo saber que el� pr�ximo rey ser�a su hijo Shlomo. Era Shlomo quien podr�a
proseguir del mejor modo posible el trabajo de David y completar la construcci�n
del Beit HaMikdash.
Nuestros
Sabios nos dicen: �Los justos no tienen descanso en este mundo ni en el mundo
venidero�. Los justos no tienen deseos de sentarse y dejarse estar. Ellos
aprovechan cada oportundidad de crecimiento. Tal como aprendemos de Abraham y
de David, no hay jubilaci�n de la profesi�n de padres, ni tampoco del servicio
de D-os.
Selecciones de fuentes
cl�sicas en las que se expresa LUD Para la gran mayor�a de los jud�os que viven en Israel y en todo el
mundo, la ciudad de Lud (Lida) se asocia con el Aeropuerto Internacional Ben
Guri�n. Si bien no aparece mencionada en forma espec�fica en el Tanaj, la
tradici�n cuenta que Lud era una ciudad fortificada cuando Yehosh�a condujo
al pueblo a la Tierra Prometida. Tras ser reconstruida por los descendientes
de la tribu de Biniam�n, se convirti� en una ciudad de importancia. El Talmud (Mesejta Sanhedr�n
32b) menciona a Lud como el asiento de la academia de la Tor� y el tribunal
judicial del gran sabio Rab� Eliezer. Los mercaderes de Lud eran famosos por
sus grandes negocios (Mesejta Bava Metzia 49b), lo cual sugiere que la ciudad
era un centro comercial. La moderna Lud es una ciudad desarrollada
poblada principalmente por inmigrantes que llegaron tras el establecimiento
de Israel, y tambi�n por �rabes que viven en la ciudad vieja. |
Escrito y Recopilado por: Rabino Yaakov Asher Sinclair
Editor y Responsable: Rabino Moshe Newman
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� 1998 Ohr Somayach
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